Apuntó que esta política se inscribe en la meta de generar y fortalecer el ingreso de las personas y para que “todos los mexicanos, sin distinción, puedan tener acceso al sistema financiero”, tengan control de sus ahorros y puedan realizar pagos por la prestación de servicios, a través de sistemas electrónicos. 

Esta estrategia también tiene el objetivo de que las personas sean “menos vulnerables, menos frágiles”, y tengan un menor riesgo de perder su patrimonio o caer en la pobreza, dijo el mandatario federal durante el acto realizado en el patio central de Palacio Nacional.

Con la presencia de la Reina Máxima de los Países Bajos, y asesora especial del secretario general de las Naciones Unidas sobre Inclusión Financiera par el Desarrollo, así como del gobernador del Banco de México, Agustin Carstens, el Ejecutivo federal indicó que esta Política, articula esfuerzos gubernamentales y del sector privado, basados en seis ejes.

Entre estos puntos, se encuentra fomentar la educación financiera, para que la población conozca, incluso desde una edad temprana, cómo utilizar y aprovechar los instrumentos financieros que les sean de utilidad, para lo cual, la Secretaría de Educación Pública (SEP) incluirá este tema en los planes de estudio de educación básica.

También se impartirán cursos para beneficiarios de programas sociales como Prospera, Mujer Pyme y Crédito Joven, además de que los consulados en Estados Unidos capacitarán a los connacionales sobre el sistema financiero de ese país, expuso acompañado de los secretarios de Hacienda, Luis Videgaray Caso, y de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu.

También se plantea el uso de las innovaciones tecnológicas para poder aprovechar las diferentes plataformas, para que se puedan pagar diversos servicios a través de computadoras o teléfonos inteligentes, y destacó que la reforma en telecomunicaciones permitirá ampliar la cobertura de estos servicios, integrar a la población excluida y fomentar la conectividad de servicios financieros digitales.

Peña Nieto reconoció que México sigue siendo un país de contrastes, donde “aún conviven prosperidad y marginación; vanguardia y rezago”, por lo que se establece un plan para el desarrollo de infraestructura, con el fin de “ir cerrando brechas para que todas las regiones cuenten con las mismas oportunidades, incluyendo el acceso a servicios financieros”.

También se establece un mayor acceso y uso de servicios financieros formales para la población subatendida y excluida, y refirió que durante su gobierno, se ha logrado incluir al sistema financiero a casi siete millones de mujeres en situación de pobreza, a través de la colocación de transferencias gubernamentales en tarjeta de débito.

En este sentido, el mandatario, apuntó que más de seis millones de beneficiarias cuentan con un seguro de vida para jefas de familia, y poblaciones antes excluidas, ahora se benefician de créditos empresariales a tasas de interés preferenciales, dentro de los programas Mujeres Pyme y Crédito Joven.

Asimismo, se prevén mecanismos de protección a usuarios, fomentar la seguridad de los ahorros, así como el fortalecimiento institucional de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros (Condusef), además de generación de datos y mediciones para evaluar de manera periódica la inclusión financiera.

Sobre este punto, refirió que gracias a la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera, se sabe que en el año 2012, el 56 por ciento de la población contaba con algún producto de crédito, ahorro o de seguro, y que esta cifra aumentó a 68 por ciento en tres años, al incorporarse al sistema financiero, 12.7 millones de personas más.

Previo al acto, el presidente Peña Nieto, acompañado de los titulares de las secretarías de Hacienda y Crédito Público, y de Relaciones Exteriores, tuvo una reunión privada en el Salón Azul de Palacio Nacionnal, con la Reina Máxima de los Países Bajos e integrantes de su comitiva.