Escocia, cultura, leyendas misteriosas y el Whisky
Su bebida nacional el Whisky es una de las más apreciadas en todo el mundo
2011-02-21
Su bebida nacional el Whisky es una de las más apreciadas en todo el mundo
2011-02-21
Escocia es un país muy rico en cultura y en grandes leyendas que han dado la vuelta por todo el mundo. Además, su bebida nacional el Whisky es una de las más apreciadas en todo el mundo y en sus distintas variedades no falta en casi ningún hogar del planeta.
La cultura
Entre los muchos elementos que conforman la cultura escocesa, dos han dado la vuelta al mundo. Nos referimos a la vestimenta tradicional (la falda) y por supuesto, el instrumento que acompaña cualquier celebración en el país, la gaita.
Aunque su nombre autentico es el Kilt pocos conocen la falda escocesa (fuera del país) por esta denominación.
Esta falda formada por tela plisada guarda un diseño llamado Tartan (como por ejemplo, el de la imagen derecha).
El tartan es un patrón de alternancia de colores que forman cuadros con una ancho y una secuencia determinados.
Las diferentes posibilidades en su estilo servían para identificar a aquel que lo llevaba.
Por ejemplo, aunque las telas eran todas similares, la cantidad y la calidad de los colores indicaban las posibilidades económicas de quien llevaba el kilt. Otras veces según su utilidad la combinación de los colores se realizaba de una manera u otra ya que para las cacerías o guerras se empleaban colores oscuros a modo de camuflaje en los bosques.
El Kilt y su correspondiente tartan también servían para diferenciar los clanes, un aspecto muy tradicional de la evolución social del país. La palabra deriva del gaélico “clann” que significaba “niños”. En un principio los jefes de cada familia eran los padres, para luego heredar su cargo el hijo mayor, por eso a los nombres se les añadía el prefijo “Mc” o “Mac” que quiere decir “Hijo de”. Con el paso de los años la palabra clan pasó a denominar un grupo bajo las órdenes de un líder.
Independientemente del diseño, el tartan y el kilt son la representación de la tradición y unidad escocesa. Tiene origen en una costumbre celta de atar a la cintura un enorme trozo de tela con el que se protegían del frío por las noches. La fama de esta prenda se disparó con las victorias del equipo militar de élite de las Tierras Altas, conocido por su carácter luchador.
Las medidas del kilt se confeccionan con el individuo de rodillas, el largo de la falda ha de tocar el suelo. Otra regla para lucir esta indumentaria es no llevar nada bajo ella, al igual que lo hacían los antepasados. Asimismo, igual de estricto es el resto de la indumentaria que componen el traje típico escocés: un bolso de cuero en un costado llamado “Sporran”, una gorra generalmente azul, y en ocasiones, una bufanda con el mismo tartan que la falda. Esta bufanda es un homenaje a la parte de arriba que los kilt tenían antiguamente y que se realizaba con el sobrante de la tela inferior. Este sobrante se suprimió posteriormente por razones de comodidad y movilidad de los trabajadores.
La Gaita Escocesa Pese a que la primera referencia a una gaita data del siglo I a. C. y se supone perteneció a un pueblo hitita de la península de Anatolia, consta que desde aproximadamente tres siglos más tarde este instrumento ya se había extendido por otros países como la India, Egipto, Francia, España y el resto de Europa. En las islas británicas también se introdujo la gaita, pero no se sabe a ciencia cierta si llegó desde Roma o desde Irlanda. Concretamente, la gaita escocesa está formada por un fuelle del que parte un conducto por el que se toca la melodía. Los tres roncones que se apoyan sobre el hombro del instrumentista producen los sonidos bajos que acompañan la pieza musical.
Este esquema se debe al tipo de gaita que se creó en las Highlands, llamada “gaita grande” o piob-mhor. Para la fabricación de sus partes se empleaban antiguamente materiales como el cuero y la piel animal para la bolsa de aire o el hueso y el marfil para los roncones. Actualmente se emplean maderas nobles y otros productos sintéticos para construir el instrumento.
La gaita clásica tiene varios estilos y empleos. En ocasiones se utiliza su música para acompañar motivos de fiesta, reuniones rememorando hechos históricos o ancestrales relatos de amor. O bien se usaba en los fragores de la batalla como instrumento de guerra junto a los tambores.
Los especialistas definen claramente dos estilos a la hora de tocar la gaita: la variedad de baile y la variedad sinfónica. La variedad de baile se componía en acontecimientos sociales o militares. La variedad sinfónica responde a cualquier tipo de composición clásica, son piezas compuestas desde hace siglos pero que han sido transmitidas de generación en generación y de las cuales no han sido encontradas partituras algunas.
El misterio de Lago Ness
Otra parte importante de la cultura escocesa la componen las centenares de historias y leyendas, muchas de ellas surgidas de los parajes misteriosos que conforman su paisaje.
Una de los más conocidos y que ha dado la vuelta al mundo es la leyenda del Lago Ness, donde se supone habita un terrible monstruo, el que ha sido perseguido durante años y algunos aseguran haberlo visto y fotografiado, pero hasta ahora no se ha podido comprobar la existencia de este extraño ser, animal prehistórico con forma de serpiente que logró sobrevivir a la época glaciar.
Esta famosa historia ya data del siglo VII, donde se cuenta que un evangelizador tuvo que enfrentarse en medio del lago a un monstruo con forma de serpiente. Hasta el día de hoy el lugar despide un halo inexplicable y aunque no creas en esto, todos los turistas se asoman tratando de encontrar al monstruo del Lago Ness.
Este lago forma parte con otros tres lagos del Gran Glen, una inmensa falla natural de origen glaciar que corta diagonalmente el país. Escocia ha invertido mucho para modernizar esto, pero en los cuatro lagos albergan extrañas criaturas y fantasmas, los que vienen de los misteriosos castillos de la zona, como Urguhart.
Ningún turista puede irse sin conocer la Loch Morar, un lago remoto, al que cuesta mucho llegar, pero que en sus profundidades vive Morag, un monstruo casi tan popular como Nessie, pero este es peor, mucho más temible y pavoroso. Por lo menos así lo contó uno de los testimonios de Duncan Mcdonnel y Bill Simpson, dos pescadores que lo avistaron en 1969.
Otro punto bastante interesante es el Lonch Marre, entre Kinlochewe y Gairloch, donde hay un salpicón de pequeñas islas donde se esconden las tumbas de los vikingos, las que se encuentran es perfectas condiciones.
Otro misterioso lugar es Loch Arkaig, a sólo 25 kilómetros de Fort William. Esta fantasmagórica tierra se ubica en un paraje recóndito, el que está relacionado con la brujería. También se encuentra Loch na Beiste, donde uno de sus propietarios en 1840 intentó vaciarlo para encontrar a una gran bestia, pero por extrañas circunstancias desistió de su misión. En todo caso, gracias a la cálida corriente del Golfo pueden crecer palmeras y otras especies subtropicales que hacen del lugar un paraíso misterioso.
El Whisky
La bebida escocesa por excelencia merece un apartado propio. Posiblemente sea uno de los símbolos de esta cultura en todo el mundo. Su nombre deriva del gaélico escocés “uisge beatha” y significa “agua de vida”.
Originariamente, se le atribuían al whisky propiedades curativas, digestivas y rejuvenecedoras. La tradición dice que cuando recibías a alguien en tu casa tenías que ofrecerle una copa de este líquido como muestra de tu hospitalidad. En la actualidad no está vigente esta costumbre pero sí sirve para hacerse una idea de la unión que han mantenido Escocia y esta bebida durante años. Tanto es así que desde el 30 de abril al 3 de mayo se celebra todos los años el festival Spirit of Speyside, dirigido a los fanáticos del “agua de la vida".
Apareció como una forma de aprovechar la cebada mojada por la lluvia pero en la actualidad existen tres tipos de whisky: malta, grano y mezcla. Los de malta reciben su nombre porque la cebada se tuesta en un horno de malta para su posterior destilación, triturado y fermentado. Según el tiempo que se deja envejecer se denominarán de una u otra manera. Normalmente antes de su embotellamiento pasan de ocho a quince años para obtener lo que llamamos “malta single”. Cuando se destilan una vez y se embotellan directamente en el tonel adquieren un sabor más fuerte que el resto, se llama “single cask”. Por último, el whisky vatted es el resultado de una mezcla de singles elaborados en lugares distintos.
El whisky de grano en menos frecuente porque tiene bastante poco tiempo de maduración y suele ser mezclado con los de malta para dar lugar al tercer tipo: mezcla. Estos, contienen marcas conocidas como Johnnie Walter o Bells, en apariencia inferiores a los malta puros tienen también un buen sabor y apreciación entre los entendidos.
Esta industria aporta muchísimo dinero al país, por eso no es de extrañar que ya haya sido nombrada bebida oficial de los escoceses, que ponen mucho empeño en personalizar su producto. Por ejemplo, para poder escribir la palabra “whisky” o “Scotch” en la botella, ha de estar necesariamente elaborado en tierras escocesas, además esta medida está regulada por ley.
Tanta es la unión entre la bebida y la cultura que algunas destilerías que habían cerrado han abierto de nuevo sus puertas como centro turísticos para dar a conocer más sobre la fabricación del “producto nacional”. Es el caso de Dallas Dhu en Moray, que había cerrado en 1983. En otras ciudades pueden ser visitadas también destilerías en funcionamiento como la Scotch Heritage Centre en Castlehill.
Derechos Reservados © La Capital